La semana pasada organicé con unos amigos un taller infantil sobre impresión 3d, plastilina conductiva, montar robots por piezas y esa clase de cosas.
Una de los bichos que me encontré al día siguiente cuando fui a recoger y a limpiar fue esta especie de babosa con sombrero de gondolero. Y me planteé un reto.
Este blog realmente no lo visita mucha gente, pero ha habido periodos en que se han notado claras subidas de la audiencia; siempre ocasionada por un buen posicionamiento de una busqueda de palabras clave. Los días dorados (diría incluso semanas) de Diseño de Mierda ya quedan atrás y datan de cuando si buscabas una foto de Eduard Punset en Google, entre las cinco primeras imágenes propuestas por el buscador, aparecía ésta. Que ni siquiera es Punset, todo hay que decirlo. Ahí es nada, encontrando los agujeros del sistema. Hoy día el dibujo no se indexa en ninguna busqueda. Pero si buscáis imágenes de «zapatos rotos» no está del todo mal situada una foto de por aquí. A fecha de este post, en 10ª posición. (Abro un paréntesis para subrayar, por si no lo habíais notado, como se asocia mayormente el zapato roto al zapato marrón, ahí lo dejo). Y aunque este nuevo posicionamiento en el top ten no esta mal y mejora mis estadísticas, no es suficiente. No del todo suficiente.
Y aquí entra mi nuevo reto, quiero situar esta foto de la babosa en la portada de busqueda cuando la gente tecleé «sombrero de gondolero», «sombrero gondolero» o, incluso, «sonbrero gondolero».
Cuando quieras saber cómo es un sombrero gondolero quiero que te aparezca esta foto de babosa de plastilina, cuando quieras comprar un sombrero gondolero quiero que te aparezca esta foto de babosa de plastilina, cuando te quieras disfrazar de gondolero quiero que te aparezca esta foto de babosa de plastilina, cuando quieras una imagen de Venecia típica quiero que te aparezca esta foto de babosa, … Y así subir las maltrechas visitas de mi blog.
—
También quiero dedicar este post a los aficionados del Athletic de Bilbao por llevar tres horas gritando debajo de mi ventana e impidiendome hacer y pensar y escribir nada más allá que tonterías. También quisiera hacer una mención al Ayuntamiento de Madrid por su iniciativa de disponer un conjunto de barras de bar abiertas a la calle (bajo el extraño nombre «Bulev’art, tu zona de compras») hasta las 3 de la mañana en solares infrautilizados desde donde servir cervezas Heineken y mojitos en vaso de plástico por 4 € a los sedientos aficionados del Bilbao (qué aún encima mañana van a pitar nuestro querido Himno, lo que hay que ver). Y no me gustaría olvidarme de Enrique Cerezo, que ya podía tomar ejemplo y haber evitado que se jugara la Final de Copa en el Calderón y así esta gente estaría tocando los cojones en Valencia o Sevilla.